La angustiosa mala racha económica por la que atraviesa Nokia sigue su curso. La empresa finlandesa triplicó su pérdida neta en el segundo trimestre hasta 1.529 millones de euros, frente a los 492 millones perdidos un año antes. Pero además, Nokia anunció en un comunicado que su pérdida bruta entre abril y junio pasó de 544 millones de euros hace un año a 878 millones ahora.
La compañía ha justificado sus malos resultados, asegurando que este achaque se debe a que la empresa atraviesa por un “período de transición” y que está llevando a cabo una transformación estratégica. Para algunos analistas este achaque tiene nombres y apellidos: Windows Phone. Muchos expertos coinciden en que Nokia no hizo bien en elegir este sistema para que capitaneara sus teléfonos de gama alta. La compañía se debería de haber decantado por Android, una mala decisión que ahora podría estar replanteándose Stephen Elop, CEO de la firma.
En estos momentos, Nokia está ejecutando con “urgencia” su programa de reestructuración, que incluye el despido hasta finales de 2013 de 10.000 trabajadores en todo el mundo, el 7,7 % de su plantilla, una medida anunciada hace un mes. El futuro está muy negro para la compañía, que hace unos años era la número uno en su sector, puesto ocupado ahora por Samsung. A pesar de ello, Nokia sigue luchando y muy pronto presentará sus nuevos terminales equipados con Windows Phone 8.
Con motivo de este nuevo paso en su acuerdo con Microsoft, la firma con sede en Espoo ha decidido remodelar su tienda de Helsinki, Finlandia, y ha utilizado carteles para tapar sus escaparates en los que promete “algo asombroso” para el próximo 7 de septiembre. La fecha podría hacer referencia a la reapertura de la tienda, aunque la proximidad del Nokia World invita a pensar que se trata de algo más.
Posiblemente Nokia haga coincidir la reapertura de la tienda con el lanzamiento de nuevos dispositivos. Otra posibilidad, dado que la compañía ha prometido un anuncio “asombroso”, es que finalmente se muestre su tablet gobernada por Windows 8.
