Samsung ha dado a conocer los resultados financieros correspondientes al segundo trimestre del año. Gracias a su nuevo buque insignia, el Galaxy S4, la surcoreana ha logrado cerrar el tramo abril-junio de 2013 con un beneficio neto de 7,77 billones de wones (unos 5.270 millones de euros), un 49,6% más que el mismo período del año pasado y un 8,6 por ciento más que el trimestre anterior.
“Liderados por el esperado lanzamiento del Galaxy S4, han aumentado las ventas y los ingresos relativos a teléfonos inteligentes” en los meses previos al ecuador del año“, explicó Samsung Electronics en un comunicado. El objetivo ahora de la compañía es romper con este teléfono inteligente la marca de 40 millones de unidades comercializadas en todo el mundo que alcanzó su predecesor, el Galaxy S3.
Pensamos que lo conseguirá, al igual que ha logrado superar a su rival Apple este trimestre. Los de Cupertino han visto recortado su beneficio neto a 6.900 millones de dólares (unos 5.230 millones de euros). Por su parte, el beneficio operativo de Samsung Electronics en el segundo trimestre avanzó un 47,5% en términos interanuales hasta 9,53 billones de wones (unos 6.470 millones de euros), cifra que coincide con la estimación inicial publicada por la empresa hace tres semanas.
De cara al futuro cercano, el mayor fabricante de smartphones del mundo auguró que el aumento de sus beneficios tendrá continuidad en la segunda mitad del año. Robert Yi, vicepresidente de Samsung y director de relaciones con los inversores, atribuyó el pronóstico favorable a “la alta demanda estacional de dispositivos electrónicos y a las ganancias por el aumento de las ventas de teléfonos inteligentes y televisores”.
Yi, al que citó la empresa en su comunicado, recordó, no obstante, que “no se pueden pasar por alto posibles factores adversos como el retraso en la recuperación económica en Europa y los riesgos de una mayor competencia, tanto en smartphones como en otros productos electrónicos”.