Aunque no lo creamos, las grandes firmas realizan pruebas de resistencia a sus terminales antes de lanzarlo a la venta, lo que no sabemos hasta qué punto hacen las comprobaciones. CNET se han colado en los laboratorios secretos en los que Samsung realiza pruebas con sus terminales móviles y electrodomésticos y nos han desvelado datos muy interesantes.
Durante el recorrido que efectuó CNET en los laboratorios de Samsung llegaron a ver cómo usaban un arma paralizantes por descarga sobre un terminal móvil. Pero no sólo eso. Además, fueron testigos de cómo arañan las pantallas para comprobar el índice de resistencia ante posibles rozaduras.
Por otro lado, CNEt pudieron advertir cómo los tablets se someten a tests de caídas que se efectúan a un metro del suelo contra planchas de metal, tanto de frente como contra los bordes. Y esto, para colmo, en ciclos de unas 300 repeticiones hasta advertir que el dispositivo no se desmonta y que continúa funcionando, tomando nota del modo en que se perciben los desperfectos para reforzar las zonas afectadas.
Aquí no queda la cosa, llegan a someter a los teléfonos a sesiones en cámaras refrigeradas, mojadas que emulan lluvia sobre los terminales e incluso a sesiones intensivas que extenúan los controles mecánicos de los móviles. Desde CNET confirman que uno de los equipos se introdujo en una máquina que servía para pulsar rápida y repetidamente el botón de inicio del smartphone, llegando a registrar unas 200.000 pulsadas.
El objetivo de todo esto, aseguraban desde Samsung, es garantizar el correcto funcionamiento de sus teléfonos durante unos tres años en cualquiera de esas condiciones.