China Business Journal publicaba este fin de semana que el pasado 15 de marzo Apple había devuelto cinco millones de iPhone 5 a Foxconn debido a problemas en su presentación y en ciertas funciones. Lo cierto, es que, según una fuente interna de la compañía, esta cifra ha aumentado a ocho millones en las últimas horas.
De momento, ni la propia Foxconn ni Apple han hecho declaraciones, pero este varapalo habría costado a la firma de Cupertino la friolera de 32 dólares por unidad, lo que significa, que el fabricante tendría que asumir una partida no presupuestada de 256 millones de dólares.
Desde la web ZDNet han comunicado que ya se han producido en otras ocasiones problemas de control de calidad, por lo que los fabricantes tienen que ser conscientes de que se pueden tener que enfrentar a enormes desafíos tanto en el terreno tecnológico como en las cantidades producidas.
La información nos hace plantearnos una pregunta, desde el punto de vista del consumidor: ¿Está fallando el iPhone 5 más de lo que debería? Lo cierto, es que el terminal no habría logrado venderse lo suficiente, no ha sorprendido y, sobre todo, los problemas con su chasis de aluminio, entre otros, habría hecho plantearse a muchos usuarios esperarse o, peor aún para Apple, cambiar a la competencia.
La falta de innovación, sumada a los grandes logros que está haciendo Samsung, está perjudicando cada vez más a Apple, que en los últimos días ha visto como sus títulos caían. Habrá que ser optimista y hacer caso a las palabras de Steve Wozniak, co-fundador de la compañía, quien aseguraba hace unas horas que nos preparemos, ya que Apple está a punto de sorprendernos con algo realmente interesante.