Apple ha ordenado recortar la fabricación inicialmente prevista del recién estrenado iPhone 5C por una menor demanda de la esperada, según ha señalado el sitio chino Ctechcn, el recorte llegará al 50%, de 300.000 unidades a 150.000, lo que se traduce en una disminución en la producción de un 20-30%. Por el contrario, y mientras se recorta la producción del iPhone 5C aumenta la del 5S, el nuevo buque insignia de Apple y primer smartphone en el mercado con un lector de huellas dactilar.
La noticia no resulta extraña si se tiene en cuenta los datos publicados por la firma de investigación de mercado CIRP, que hace unos días indicaba que se estaban vendiendo el doble de iPhone 5S que 5C. Concretamente, algunas fuentes apuntaban días atrás que el modelo con mayor tirón de los iPhone 5S es el de color dorado, cuyas existencias están agotadas en algunos mercados.
Apple, por su parte, también ha publicado datos referidos a las ventas de sus nuevos terminales, pero lo hizo una vez concluido el primer fin de semana desde su lanzamiento. Por aquél entonces, la empresa desveló que habían vendido nueve millones de unidades, pero no precisaron cuántos eran iPhone 5S y cuántos iPhone 5C.
Por otro lado, la débil demanda del iPhone 5C no ha extrañado en el mercado, ya que cuando se presentaron los dos nuevos smartphones ya se destacó que la poca diferencia de precios entre ambos modelos (unos 100 euros) iba a inclinar la balanza de la demanda hacia el iPhone más avanzado.
Y mientras Apple lucha por el sector móvil también prepara nuevos iPad para dentro de unos días. Será el día 22 de octubre cuando conozcamos sus nuevos modelos de tablets, entre los que se encuentra la quinta generación, que, según comentan, también equipará el lector de huellas que integra el iPhone 5S.