La firma japonesa Sony presentó en el CES lo que viene a ser su primer smartphone separada de la sueca Ericsson, se trata del Xperia S, con el que vuelve a demostrar que es posible unir tecnología, diseño y altas prestaciones. Y es que, este nuevo terminal tiene un diseño elegante muy cuidado, con líneas más rectas que el de otros modelos de la compañía y con una franja plateada que bordea la parte inferior del teléfono. Sorprende también la ausencia de iconos en los botones.
Entrando en materia, este Xperia S cuenta con una pantalla Reality Display de 4,3 pulgadas con tecnología Mobile BRAVIA Engine y una resolución de 1.280 x 720 píxeles, su procesador es de doble núcleo a 1,5 GHz. Tampoco faltan en él una memoria flash interna de 32 GB, cámara con sensor de imagen retroiluminado Exmor R de 12 megapíxeles, tecnología NFC y una cámara trasera es capaz de capturar vídeo a 1080p.
Al igual que sus hermanos mayores, este nuevo teléfono también corre Android, en esta ocasión la compañía ha incluido la versión 2.3, aunque se comenta que podrá se actualizado a Android Ice Cream Sandwich durante el segundo trimestre de este año. Cabe señalar, que la interfaz de usuario que presenta no es la que hemos visto durante los últimos meses en terminales como los Sony Ericsson Xperia Arc o Neo, si no que ha sido rediseñada para aprovechar la potencia de su procesador de doble núcleo e incluye fondos animados.
El terminal también cuenta con certificación PlayStation y tendrá acceso a Music Unlimited y Video Unlimited. Tal y como ha asegurado la propia firma nipona, el nuevo Xperia S se pondrá a la venta durante el primer trimestre de este año, de momento no ha facilitado a qué precio, por lo que habrá que esperar algunas semanas para conocer este detalle.