Quedan pocas horas para que arranque el mes de julio, un mes con pocas novedades en cuanto a telefonía, pero no por ello ausente en su totalidad. Y es que, Samsung habría elegido julio para poner en las tiendas su nuevo Galaxy S 5 Mini, la versión reducida de su actual buque insignia, aunque no por ello un terminal insignificante. Y es que, aunque incorporaría una pantalla ligeramente más pequeña en comparación a la de su hermano mayor (todo hace indicar que podría tratarse de una pantalla de 4.5 pulgadas con 720 píxeles de resolución), también tendríamos otras especificaciones técnicas que se mantendrían intactas, como por ejemplo el certificado IP67 de resistencia al agua y al polvo.
Por otro lado, este nuevo dispositivo equiparía un procesador Exynos 3 de cuatro núcleos, que funcionaría a una velocidad de reloj de 1.4 GHz, así como una memoria RAM de 1.5 GigaBytes. Por su parte, la cámara principal incorporaría un sensor de ocho megapíxeles, mientras que la cámara frontal vendría con un sensor de 2.1 megapíxeles. El sistema operativo sería Android en una de sus versiones más recientes de Android 4.4.2 KitKat.
Comparando el Samsung Galaxy S 4 Mini con el Galaxy S 5 Mini nos encontraríamos que la firma ha mejorado significativamente el nuevo modelo, pero algunas características quedarían iguales. Es el caso de el número de megapíxeles de la cámara (ocho megapíxeles) o la capacidad de la memoria RAM (1.5 GHz). Sí mejoraría la pantalla y el procesador, quizá dos de las cosas que más demandan los usuarios que quieren optar por un nuevo modelo.
No sabemos cuando Samung anunciará por fin el nuevo terminal mini, aunque no creemos que tarde demasiado, sobre todo si todas las filtraciones apuntan a mitad de julio como fecha de lanzamiento.