Amazon ha confirmado que su tienda de aplicaciones móviles llegará a Alemania, España, Francia, Italia y Reino Unido este verano. Se trataba de una de las últimas grandes tiendas que faltaban por llegar a Europa. La compañía hasta el momento distribuía aplicaciones para Android en Estados Unidos, pero no había dado el paso a más lugares del mundo.
Tras anunciar la noticia, la compañía ha comentado que los desarrolladores de todo mundo pueden comenzar a subir sus aplicaciones para su posterior distribución internacional. Además, Amazon ha anunciado cambios en el acuerdo con desarrolladores, que según la compañía “simplifican el modelo de negocio”.
De este modo, en primer lugar, basándose en el éxito del lanzamiento del servicio de compras In-App en abril, y, para simplificar las condiciones globales, se están alineando los ingresos que reciben los desarrolladores por las aplicaciones de pago con los productos ‘in-app’ vendidos a través del servicio de compras ‘In-App’. Así, a partir del 1 de julio, los desarrolladores obtendrán el 70 por ciento del precio listado en la venta de cada aplicación de pago. Ello supone un cambio de las condiciones previas, en las cuales los desarrolladores ganaban o bien el 70 por ciento del precio de venta o el 20 por ciento del precio listado (el que fuera mayor).
En segundo lugar, Amazon ha explicado que los términos del acuerdo se han adaptado para ofrecer “aún más flexibilidad en torno a los plazos para la presentación de aplicaciones”. La compañía ha asegurado que los desarrolladores ahora pueden “controlar mejor qué aplicaciones se pondrán a disposición de los clientes de Amazon, y cuándo”.
Todo hace pensar, que la llegada de la tienda a nuestro continente y la bajada de precio de su exitosa tablet, Kindle Fire, son detonantes claros de que podría estar por llegar una nueva versión de su tablet a Europa.